A lo largo de los últimos años, poder ver cómo se integra el trabajo de las cámaras digitales y los efectos visuales con los elementos de acción en directo, los sets de rodaje y el entorno se ha convertido en un aspecto crucial de muchos flujos de trabajo en cine y televisión. Casey Schatz, director de producción virtual del estudio de visualización The Third Floor y colaborador en proyectos como Avatar: el sentido del agua o Juego de tronos y películas del universo cinematográfico de Marvel, ha sido un innovador clave para la integración de estos dos mundos en los departamentos cinematográficos y los equipos de rodaje.
Una nueva herramienta que está facilitando este proceso es el Leica BLK360 para el escaneado LiDAR.
El escaneado LiDAR se adapta a la perfección a diversos servicios de previsualización, entre los que se pueden incluir un estudio de un set o una localización para crear un entorno virtual y cámaras virtuales que respeten los parámetros del lugar físico.
“La previsualización consiste en practicar los aspectos creativos y técnicos de la toma antes de llegar al set”, comenta a Leica Geosystems Casey Schatz, director de producción virtual de The Third Floor. “Cuando una toma es compleja desde el punto de vista técnico y los mundos del equipo de construcción, el departamento de arte y los especialistas en efectos visuales tienen que converger, es preferible hacer un ensayo digital previo”.
Schatz comenzó a usar LiDAR hace años con estaciones alquiladas siempre que la toma lo requería, antes de comprar un Leica BLK360 G1 cuando este escáner compacto se comercializó en 2017. Ahora ha continuado la tradición con el nuevo BLK360, que captura nubes de puntos para convertirlas en mallas empleadas en la producción virtual antes, durante y después de la realización de la toma en el set.
El BLK360 en un set
“En un set de rodaje, el tiempo es muy valioso”, continúa. “El escaneado láser nos permite alinear lo digital y lo real de un modo mucho más eficiente”.
En el set, el equipo empieza realizando escaneados LiDAR del escenario de acción en directo, seguidos de escaneados del set y de su relación con varias marcas de captura de movimiento dibujadas en el suelo del escenario. Eso permite alinear el volumen de captura de movimiento —donde se realiza el movimiento de las posiciones del actor y de la cámara— con el escenario físico.
“Además del escenario y los sets, escaneamos los elementos de atrezo, los componentes de la cámara, las luces y todo lo que podemos para que la fusión entre lo real y lo digital sea lo más auténtica posible”, explica Schatz. “De ese modo, la integración de la toma es mucho más rápida y precisa. La idea es resolver tantos problemas como se pueda con antelación, en la fase de preproducción”.
Hemos podido comprobar que esto es indispensable y eficiente desde el punto de vista del coste, además de unificar el trabajo de los distintos departamentos implicados en la producción, desde el equipo de construcción a los técnicos de iluminación, los asistentes de cámara y todos los responsables de los departamentos para los que contar con un plan de rodaje unificado pueda ser beneficioso.
Aunque la industria de los efectos visuales usa principalmente mallas 3D y no nubes de puntos, para Schatz fue una ventaja disponer de la información inmediata de la nube de puntos a través de Leica Cyclone FIELD 360.
“Poder acceder a la nube de puntos prácticamente al instante generó flujos de trabajo que no había previsto, como, por ejemplo, tener a mi lado a los miembros del equipo de creación de controles digitales y volar por la nube de puntos de colores hasta el techo para tomar sobre la marcha decisiones clave sobre los puntos de sujeción y las cuestiones de seguridad”, añade Schatz.
La velocidad del escaneado láser fue especialmente importante en Avatar: el sentido del agua al emplear el sistema de línea visual: un monitor suspendido por cuatro cables que se podía mover por el espacio y representaba a un personaje digital.
“Tenía que resolver dónde estarían los puntos de sujeción para los cables y hacerlo de tal forma que pudiéramos rodar toda la escena sin que los cables se intersecaran con nada en el decorado”, continúa. “A medida que se colocaban las luces, las estructuras y los difusores de seda, yo escaneaba casi cada hora y ejecutaba la simulación del sistema de línea visual para comprobar que los cables y el monitor no chocaban con nada. Es mejor descubrir estos problemas en CG que encontrárselos en la realidad”.
Después, Schatz lo procesaba todo casi de inmediato para generar los materiales que necesitaba.
“En promedio, yo diría que una vez que me sentaba en la mesa y conectaba el iPad, tardaba entre cinco y siete minutos en tener la nube de puntos en Leica CYCLONE Register 360, y unos veinte minutos después la malla estaba en el software Maya”, explica Schatz.
Cámara virtual, resultados reales
En CG, la cámara se representa exclusivamente con su punto nodal y no con el cuerpo y la grúa que la sujetan en el mundo real. Sin embargo, al usar el BLK360 para escanear la grúa de la cámara en el entorno, el equipo de TTF pudo ejecutar el movimiento de la cámara de CG para comprobar si había colisiones y asegurarse de que estaba dentro de los parámetros físicos de la grúa.
“Hubo un par de ocasiones en las que dije a todo el mundo con una semana de antelación: ‘vamos a tener que liberar esta pared [un término usado en la jerga cinematográfica para hacer que una pieza del set sea móvil]’, porque era evidente que las cámaras estaban demasiado cerca de algunas estructuras físicas. De ese modo, el departamento de arte pudo prepararse para mover ese elemento el día del rodaje”.
“Hemos establecido un ciclo de retroalimentación en el que usamos las mediciones LiDAR para determinar cuál es la mejor posición para los componentes empleados, los escaneamos y a continuación podemos proporcionarle la información actualizada al equipo de CG para que obedezca a la realidad. De este modo, las dos cosas están armonizadas”, añade.
Luces, cámaras... ¡LiDAR!
En cuanto al futuro del escaneado láser en el set, Schatz afirma que será brillante, especialmente con los dispositivos BLK de Leica Geosystems, rápidos y compactos.
“Parte de mi trabajo consiste en ser un embajador entre lo digital y lo real. Cuanto más escaneo, menos riesgo hay de error humano”, señala Schatz a Leica Geosystems.
“En el pasado había descartado las herramientas LiDAR porque las consideraba demasiado lentas para el ritmo vertiginoso de los rodajes de acción en directo”, señala. “Podías obtener unos resultados increíbles, pero el equipo era grande, caro y lento de usar. El BLK ha refutado esa idea, y no volveré a estar en un set sin él”.